El bien para la mayoría en Nosara
- E Gutiérrez
- hace 3 horas
- 3 Min. de lectura
En comunidades pequeñas es común encontrar causas especiales que conmueven: una familia que necesita apoyo, una situación difícil o una historia de superación. Este espíritu solidario ha acompañado a Nosara durante décadas y ha permitido apoyar decenas de causas, familias, animales y proyectos educativos.
Pero Nosara ya no es una comunidad pequeña. En 24 años triplicó su población; en los últimos cinco, duplicó sus viviendas. Hoy existen más de 60 entidades sociales compitiendo cada año por fondos, mientras los problemas se vuelven más complejos, interconectados y costosos. La composición poblacional es diversa, con culturas distintas, barreras lingüísticas y percepciones limitadas que influyen en cómo donamos y en qué priorizamos.
Ante este escenario, el modelo tradicional de filantropía —basado en causas puntuales y emocionales— se está quedando corto. No porque esas causas no importen, sino porque no logran abarcar la magnitud de los desafíos que hoy afectan a miles de personas en Nosara. Además, la mayoría de estos problemas y de las organizaciones que los atienden no cuentan con presupuestos de comunicación, por lo que las soluciones y las formas de ayudar suelen quedar invisibilizadas.
Por eso el Censo Nosara 2024 llega en un momento clave: es la herramienta más importante que tenemos para reorientar la ayuda hacia el bien común y hacia soluciones de impacto estructural, sostenibles y de largo plazo.
Los resultados del censo no cuentan una historia “bonita”, ni vienen envueltos en narrativa de campaña. Son una fotografía sin filtros de la realidad: quiénes somos, cómo vivimos y cuáles son las condiciones actuales de la población. Esa claridad nos permite dejar de adivinar y empezar a actuar con precisión.
El efecto multiplicador del bien común
Una beca privada puede costar $14,000 y beneficiar a un estudiante.
Esa misma inversión puede cubrir parte del salario de un profesor que enseña a 540 alumnos, o pagar un año de alquiler para docentes que no pueden vivir en Nosara.
Mismo dinero, impacto totalmente distinto.
Donar al bien común significa multiplicar el impacto.
Pero también implica más dificultad: apoyar una Junta de Educación o a la Cruz Roja requiere trámites, revisiones y procesos públicos. No es tan simple como enviar un SINPE. Requiere tiempo, acompañamiento y personas dispuestas a sostener el esfuerzo.
Y esas personas están agotadas. Muchos líderes comunitarios participan en dos, tres o cuatro juntas a la vez, sacrificando descanso, familia y vida personal para sostener servicios esenciales: agua, salud, educación, seguridad. A medida que crece la población, crece también la carga sobre estos equipos.
En estas fechas, donde es habitual compartir y ayudar, compartimos un breve resumen de desafíos, soluciones en marcha y esfuerzos donde puedes sumar y crear impacto multiplicador para miles de personas que lo necesitan.
¿Dónde están los principales desafíos según el Censo?
1. Salud y emergencias médicas
Necesidades: ampliar el EBAIS, creación del Área de Salud Nosara, aumentar ambulancias 24/7, sostenibilidad del Comité de Cruz Roja, nueva estación Cruz Roja.
Contacto: Michael Fonseca (Comité de Salud), José Astorga y Carlos Mendoza (Cruz Roja Nosara).
2. Educación pública
Cada escuela pública tiene su Junta de Educación. Proyectos principales: infraestructura, atraer profesores, y convertir el colegio en técnico.
Datos clave del censo: una tercera parte de los jóvenes con 17 años no está estudiando; 70% tiene rezago educativo de 1 año o más.
Contactos: Junta de Educación de cada escuela y del Liceo Bocas de Nosara.
3. Seguridad
Aumento de criminalidad y necesidad de más policías y coordinaciones interinstitucionales (Migración, Municipal, Tránsito, Control de Drogas).
Problema crítico: reparación de patrullas tarda hasta 6 meses, dejando la comunidad sin cobertura.
Contacto: Jefe de Policía, Olger Briceño.
4. Medio ambiente y gestión del agua
Soluciones sostenibles requieren entender profundamente la dinámica social para regular, aplicar la ley y regenerar ecosistemas. No podemos pensar en soluciones ambientales sin proteger también a la comunidad y encontrar ese balance requiere de un trabajo técnico en el que estamos trabajando.
¿Cómo involucrarse?
Si te interesa la salud, la educación, la seguridad o el medio ambiente, puedes buscar o escribirnos y te pondremos en contacto directo con los equipos locales que encaminan estos frentes.
Y si te apasionan los datos y la investigación, podés acompañarnos en la construcción de soluciones basadas en evidencia.
Gracias a la participación de miles de familias, hoy Nosara tiene por primera vez las bases para formar un futuro sostenible, informado y representativo. Sumá tu colaboración.
Donaciones: www.amigosofcostarica.org/affiliates/conoser





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